Mientras aún siento fuertes dudas sobre ir a ver "Transformers 2" por los comentarios tan opuestos que he recibido, preferí acompañar a mi madre a ver la última co-producción de Disney y Pixar, "UP", traducida aquí como "Una Aventura de Altura", aunque parafraseando a mi amigo el Confi, debería llamarse "Vamo' Arriba". Lo único que sabía del argumento era algo acerca de una casa voladora y dos personajes muy disparejos que participan de la aventura: un viejo cascarrabias y un niño boy-scout muy inocente. La motivación principal de mi madre era que el anciano le recordaba mucho a mi abuelo, quien está por cumplir un año de fallecido. Por mi parte, me esperaba un buen trabajo de animación y una historia agradable para pasar el rato.
Como todos los trabajos de Pixar, la película tiene un sabroso entremés, un corto llamado "Partially Clouded" o "Parcialmente Nublado", el cual presenta la historia de una cigüeña que tiene por misión transportar a los infantes creados por las nubes hacia sus respectivos hogares. Lo particular de esta cigüeña es que, a diferencia de las otras que llevan niños y cachorros muy simpáticos, a ésta le tocan bebés de cocodrilo, de erizo, de tiburón y demás animales no muy fáciles de llevar. El final deja una pequeña enseñanza sobre la comprensión y el sacrificio. Muy bien logrado para apenas unos minutos de animación.
Luego de tener el piso bastante movido por el desenlace, empezamos con la simpática historia de Carl y Ellie, de cómo se conocieron compartiendo sueños desde niños y permitieron que esos sueños los unieran para siempre en matrimonio. Su principal anhelo era cumplir la promesa que se hicieron desde niños: levantar una casa en una hermosa región de Sudamérica (estilo montaña-selva otra vez, pero no me molestó el estereotipo tanto como en la última película de Indiana Jones). Sin embargo, como a todos nos pasa, una serie de inconvenientes hacen que su deseo se vaya postergando, y lamentablemente, el tiempo no perdona. Ellie deja este mundo y se lleva consigo una buena parte del espíritu del hasta entonces alegre y apacible Carl, convirtiéndose entonces en un viejo renegón a quien nadie parece escuchar. Una discusión con los constructores que trabajan alrededor de su casa le cuesta un juicio, el cual pierde y es confiando a un asilo. Para sorpresa de todos, antes de que puedan llevárselo, Carl toma la inimaginable decisión de emprendenr el viaje a Sudamérica, llevándose toda su casa levantada por un millar de globos llenos de helio. Carl no esta solo en esta aventura, pues sin saberlo lleva consigo a Russel, un niño explorador que tenía la noble intención de ayudar al anciano con alguna tarea para ganarse la última insignia que le faltaba. Al viejo señor Fredicksen no le queda más opción que dejarlo pasar a la casa en pleno vuelo y así ambos inician una jornada muy poco usual, en la cual encuentran perros parlantes, a un héroe venido a menos y a un pajarraco que más parece una versión prehistórica del Pájaro Dodo de la Warner Bros.
Como dije, me esperaba una historia entretenida, pero lo que presenta "UP" no es sólo eso. La película toca temas bastante adultos, no sólo desde el lado de Carl, quien se convirtió en un opuesto total de lo que era en su juventud por las tragedias vividas, si no también por parte de Russel, quien revela no haber tenido una infancia normal por culpa de los conflictos de sus padres. Hacia el final de la historia, ambos se encuentran a sí mismos y redescubren el sentido de sus vidas, dejándole a los espectadores un significado completamente nuevo de lo que significa una "promesa de corazón".
Vale la pena ir a verla en 3D pues literalmente le da otra dimensión a la animación. Como todos los trabajos de Pixar, dejará muy satisfecho al público más exigente. Es buena idea llevar a alguien a quien quieran mucho.
Como todos los trabajos de Pixar, la película tiene un sabroso entremés, un corto llamado "Partially Clouded" o "Parcialmente Nublado", el cual presenta la historia de una cigüeña que tiene por misión transportar a los infantes creados por las nubes hacia sus respectivos hogares. Lo particular de esta cigüeña es que, a diferencia de las otras que llevan niños y cachorros muy simpáticos, a ésta le tocan bebés de cocodrilo, de erizo, de tiburón y demás animales no muy fáciles de llevar. El final deja una pequeña enseñanza sobre la comprensión y el sacrificio. Muy bien logrado para apenas unos minutos de animación.
Luego de tener el piso bastante movido por el desenlace, empezamos con la simpática historia de Carl y Ellie, de cómo se conocieron compartiendo sueños desde niños y permitieron que esos sueños los unieran para siempre en matrimonio. Su principal anhelo era cumplir la promesa que se hicieron desde niños: levantar una casa en una hermosa región de Sudamérica (estilo montaña-selva otra vez, pero no me molestó el estereotipo tanto como en la última película de Indiana Jones). Sin embargo, como a todos nos pasa, una serie de inconvenientes hacen que su deseo se vaya postergando, y lamentablemente, el tiempo no perdona. Ellie deja este mundo y se lleva consigo una buena parte del espíritu del hasta entonces alegre y apacible Carl, convirtiéndose entonces en un viejo renegón a quien nadie parece escuchar. Una discusión con los constructores que trabajan alrededor de su casa le cuesta un juicio, el cual pierde y es confiando a un asilo. Para sorpresa de todos, antes de que puedan llevárselo, Carl toma la inimaginable decisión de emprendenr el viaje a Sudamérica, llevándose toda su casa levantada por un millar de globos llenos de helio. Carl no esta solo en esta aventura, pues sin saberlo lleva consigo a Russel, un niño explorador que tenía la noble intención de ayudar al anciano con alguna tarea para ganarse la última insignia que le faltaba. Al viejo señor Fredicksen no le queda más opción que dejarlo pasar a la casa en pleno vuelo y así ambos inician una jornada muy poco usual, en la cual encuentran perros parlantes, a un héroe venido a menos y a un pajarraco que más parece una versión prehistórica del Pájaro Dodo de la Warner Bros.
Como dije, me esperaba una historia entretenida, pero lo que presenta "UP" no es sólo eso. La película toca temas bastante adultos, no sólo desde el lado de Carl, quien se convirtió en un opuesto total de lo que era en su juventud por las tragedias vividas, si no también por parte de Russel, quien revela no haber tenido una infancia normal por culpa de los conflictos de sus padres. Hacia el final de la historia, ambos se encuentran a sí mismos y redescubren el sentido de sus vidas, dejándole a los espectadores un significado completamente nuevo de lo que significa una "promesa de corazón".
Vale la pena ir a verla en 3D pues literalmente le da otra dimensión a la animación. Como todos los trabajos de Pixar, dejará muy satisfecho al público más exigente. Es buena idea llevar a alguien a quien quieran mucho.
